It's ninja time!

Los ninja o shinobi eran mercenarios y espías del Japón feudal. Nacían en familias de ninja y se les enseñaba la profesión desde la infancia, una característica compartida con los samuráis. Sin embargo, los samuráis seguían el bushido, un código de honor, mientras que los ninja no. Por ello, rara vez cometían el seppuku y sus métodos eran considerados poco ortodoxos. Esto hacía que fueran tanto temidos como usados por los líderes militares.

Como muchos saben, practicaban el ninjutsu, un arte marcial cuyo nombre está compuesto por los kanjis de "nin" (esconderse) y "jutsu" (arte o técnica). El ninjutsu se basa en el manejo del cuerpo y en el combate sin armas y con ellas. Entre muchas de las armas usadas por los ninjas, algunas de las más usadas son las siguientes: 

Ninjato, ninjaken o shinobikatana, un tipo de espada corta

Katana, también usadas por los samuráis

Bo, un palo de aproximadamente 180 centímetros

Shuriken, cuyo apropiado nombre significa "espada escondida en la mano"

Kusarigama, una hoz con una cadena

Si quieres conocer otras armas típicas de los ninjas, puedes pinchar aquí y accederás a un listado de la wikipedia.

Además de en artes marciales, los ninja se especializaban en el asesinato, el sabotaje, la infiltración y el espionaje y sabían preparar venenos, antídotos y bombas. Contaban, además, con múltiples técnicas de supervivencia, huída, distracción, camuflaje y ocultación y aprendían diferentes profesiones para poder hacerse pasar por otras personas. En los ataques nocturnos, la ropa solía ser de color oscuro para camuflarse mejor y no necesariamente negra, pero, a pesar de la creencia popular, era más común que se disfrazaran de civiles, samuráis o monjes para pasar desapercibidos. Uno de los disfraces más usados por su conveniencia era el de komuso, un monje mendigante de la secta fuke del budismo zen.

También existían mujeres ninja, conocidas con el nombre de kunoichi. Aprendían ninjutsu y otras técnicas de ninja durante los primeros años, pero después, a diferencia de los hombres, su entrenamiento tomaba otro rumbo y se centraba  más en los disfraces, la creación de venenos, y el arte de la seducción, que abarcaba también las relaciones sexuales. En algunos casos,  las kunoichi se llegaban a casar para cumplir con la misión. Solían disfrazarse de geisha, prostitutas, adivinas, empleadas domésticas y artistas y solían utilizar los plieges de la ropa femenina para ocultar armas y otros objetos útiles. 



¡Con todas estas habilidades, no es de extrañar que se les haya atribuído a los ninja el poderes sobre naturales como el de la invisibilidad o el de la transformación a lo largo de la historia!